Escarpados pináculos de piedra caliza, que recuerdan a afilados cuchillos, emergiendo entre las nubes y la densa floresta del Parque Nacional de Gunung Mulu. Esta es una de las vistas más preciadas por los viajeros que visitan la región de Sarawak, en el Borneo malayo. Para poder divisar estas extraordinarias formaciones, es necesario llegar a mitad de la cumbre del Gunung Api, el segundo pico más alto del parque, situado a 1.750 metros de altura.
Los Pináculos de Mulu se erigen impertérritos como prominentes torres que vigilan la selva que les rodea, alcanzando hasta los 50 metros de altura. Llegar hasta ellos supone un verdadero desafío de tres días que empieza con un viaje en bote por el río Melinau hasta Kuala Berar o Kuala Litut, dependiendo del punto de partida en el parque. Desde allí, y siempre acompañados por un guía experimentado, empieza la primera etapa hasta el Campamento 5, una caminata de 8 kilómetros por la selva, la mayor parte por terreno llano. La primera toma de contacto con el terreno deja atisbar las altas dosis de aventura y naturaleza salvaje que vivirán los visitantes en los próximos días.
Llegados al Campamento 5, es buen momento para descansar en el pequeño hostal que cuenta con todas las facilidades para cocinar y pasar la noche. Eso sí, los viajeros deben llevar suficiente comida para los tres días que durará la expedición. Situado cerca de la garganta del río Melinau, el Campamento 5 será el punto de partida para ascender el Gunung Api. Siempre que las condiciones meteorológicas lo permitan, la caminata empieza temprano a la mañana siguiente, alrededor de las siete. Aunque el camino hasta la cumbre es sólo de 2,5 km, es bastante empinado hasta llegar a los 1.200 metros de altura. Los senderistas más experimentados pueden completar la ruta en unas 2 o 3 horas, los que estén menos en forma, en unas 4 o 5 horas.
Si la exigencia del camino lo permite, los senderistas pueden admirar a su alrededor hermosas variedades de plantas de la familia Dipterocarpaceae, para luego adentrarse en un bosque de musgo, con restos de piedra caliza a lo largo del camino, por lo que hay que tener sumo cuidado para no resbalar. A una media hora de la partida, la primera parada es para admirar el pequeño pináculo situado en un enigmático bosque de piedra caliza y llamado así porque recuerda a las grandes formaciones que se verán al llegar a la cumbre. Desde allí, el camino sigue ascendiendo, tanto que los visitantes tienen que ayudarse de cuerdas y escaleras de aluminio colocadas en las rocas para facilitar el ascenso. Aunque la vegetación y la fauna son escasas, en el último tramo se pueden encontrar distintos tipos de orquídeas raras, espectaculares plantas jarro como la Nepenthes o musarañas de montaña.
Pero la verdadera recompensa se encuentra a 1.200 metros de altitud, desde donde es posible divisar las múltiples formaciones calcáreas en forma de afilados cuchillos que se elevan hacia el cielo desde la densa selva tropical. Observarlos rodeados de nubes bajas añade un halo de misterio a este increíble prodigio de la naturaleza. Una vez recuperados de la subida, toca volver al campamento base, algo que llega a ser igual de duro o más que el ascenso. Dependiendo de la destreza de los senderistas, se puede tardar entre 5 y 8 horas.
Una vez en el campamento, nada mejor que refrescarse en el charco formado por las aguas del río Milenau para relajarse tras el gran esfuerzo realizado. Después de reponer fuerzas con una suculenta cena, la noche en el campamento será una buena oportunidad para rememorar con otros compañeros de viaje la subida al Gunung Api y las asombrosas vistas de los pináculos, que ya forman parte de vuestras aventuras en Borneo.
Más información: http://mulupark.com/tours-activities/treks-trails/pinnacles/
- Consejos prácticos:
- Cómo llegar: la mejor forma de llegar al parque es por vía aérea. Hay vuelos diarios desde Miri y Kuching, así como tres veces a la semana desde Kota Kinalabu.
- Temporada alta: de junio a septiembre se incrementa el número de visitantes, sin embargo se recomienda reservar el alojamiento y visitas al parque con anticipación en cualquier época del año.
- Qué debes incluir en tu equipaje:
- Unas buenas botas de montaña.
- Zapatos de goma para el trayecto en bote.
- Repelente de insectos.
- Kit de primeros auxilios.
- Medicamentos personales.
- Artículos de aseo.
- Linterna.
- Pilas de repuesto.
- Impermeable.
- Toalla.
- Manta ligera.
- Suficiente comida para 3 días (incluidos snacks energéticos y 2 botellas de agua para la caminata).
- Mochila pequeña.